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JUAN
GUERRA
Publicado
en EJE 21, ABRIL 20-2013 SÁBADO
El 5 de mayo se van “Los Reencauchados”
Confirmado: Desaparece a partir del 5 de mayo de la programación del Canal Caracol el divertido “Noticiero NP&” (el de las llamadas “Noticias Políticamente Incorrectas”) que hizo más carrera entre el público con el antiguo nombre de “Los Reencauchados”.
La amena caricatura del informativo comenzó los domingos a las 7 y 30 de la noche, después del noticiero de verdad y antes de “Séptimo Día”, pero por razones de mercadeo fue adelantado para el indeseado horario de las 6:30 pm del mismo día festivo. Su sacada de “la parrilla” fue mortal. Resultó alarmante el “bajonazo” en los termómetros de sintonía.
La defunción del espacio fue anunciada en una reunión en la que participaron directivos, productores, libretistas, músicos y técnicos.
Los 32 muñecos son de Laserna
Este es otro ingrediente que pesó en la decisión de acabar con el programa que empezó a morir con el cambio de horario: ocurre que los 32 muñecos de látex (fabricados por encargo, en Francia) son de propiedad de Pablo Laserna, a quien se le paga un arriendo por la utilización de los mismos.
Pero Laserna (ex presidente del canal de los Santo Domingo) cambió de carpa: ahora conduce por RCN, el canal adversario, el concurso ¿”Quién quiere ser millonario”, que originalmente fue de la marca Caracol Televisión.
Como están las apuestas, no sería raro que los muñecos reaparecieran un día de estos en el canal de los Ardila Gaviria.
Confirmado: Desaparece a partir del 5 de mayo de la programación del Canal Caracol el divertido “Noticiero NP&” (el de las llamadas “Noticias Políticamente Incorrectas”) que hizo más carrera entre el público con el antiguo nombre de “Los Reencauchados”.
La amena caricatura del informativo comenzó los domingos a las 7 y 30 de la noche, después del noticiero de verdad y antes de “Séptimo Día”, pero por razones de mercadeo fue adelantado para el indeseado horario de las 6:30 pm del mismo día festivo. Su sacada de “la parrilla” fue mortal. Resultó alarmante el “bajonazo” en los termómetros de sintonía.
La defunción del espacio fue anunciada en una reunión en la que participaron directivos, productores, libretistas, músicos y técnicos.
Los 32 muñecos son de Laserna
Este es otro ingrediente que pesó en la decisión de acabar con el programa que empezó a morir con el cambio de horario: ocurre que los 32 muñecos de látex (fabricados por encargo, en Francia) son de propiedad de Pablo Laserna, a quien se le paga un arriendo por la utilización de los mismos.
Pero Laserna (ex presidente del canal de los Santo Domingo) cambió de carpa: ahora conduce por RCN, el canal adversario, el concurso ¿”Quién quiere ser millonario”, que originalmente fue de la marca Caracol Televisión.
Como están las apuestas, no sería raro que los muñecos reaparecieran un día de estos en el canal de los Ardila Gaviria.
¿Harían las paces dos enemigos acérrimos?
Desde hace meses venían enfrentados el periodista de Caracol, Darío Arizmendi y el ex asesor presidencial, José Obdulio Gaviria, primo hermano del temido narcotraficante Pablo Escobar.
De un tiempo para acá este pugilato parece haber llegado a una especie de armisticio y nada ha vuelto a trascender sobre esta pelea que se dio entre reclamos, de una parte y críticas, del otro, todo alrededor de situaciones que se presentaron durante los dos gobiernos del expresidente Uribe.
Siendo ambos dos gallos de pelea, la gente se pregunta qué ocurrió para que cesaran los mutuos ataques que se hacían el periodista y el primo del narcotraficante.
Sería que Arizmendi, de pronto, encontró algo que le sirvió para decirle a José Obdulio, por ejemplo, “hagámonos pasito” y que éste entendió perfectamente el significado de estas dos palabras?
Averígüelo Vargas, como dicen por ahí, pero algún día se sabrá el motivo de la tregua.
Qué vergüenza
El Concejo de Medellín tiene 21 integrantes. Pero que sólo cinco de ellos atiendan con juicio la citación a un funcionario y le escuchen su informe de gestión, es algo que no debería ocurrir.
Sin embargo eso fue lo que pasó el viernes con el gerente de Metroparques, quien entre dolido y ofendido, suponemos, entregó sus informaciones a cinco concejales apenas, pues los demás estaban en asuntos particulares o políticos.
Y algunos de los cinco presentes en el recinto, twiteando, hablando por celular o roncando.
Y después algunos preguntan por qué la política y los políticos tienen tal grado de desprestigio. Si todos los días hacen algo para aumentar esa adversa opinión de la comunidad.
Larga vida a la radio cloaca
La radio de albañal que se ejerce en buena parte del dial colombiano, tanto del AM como del FM recibió el beneplácito del ministro de Comunicaciones, Diego Molano, quien se limitó a afirmar simplemente que “en Colombia hay libertad de expresión”.
Confundió el despistado ministro libertad de expresión con vulgaridad, y de paso le dio vía libre a todos los desadaptados que ahora invaden el dial noche y día con contenidos dignos de un burdel, pero nunca de una emisora respetable.
Se declaró impotente el ministro Molano ante ese condenable proceder de buena parte de la radio antioqueña y colombiana, al afirmar que por fallos de las cortes en Colombia hay libertad de expresión y que bajo esa libertad de expresión “la corte constitucional ha limitado muchísimo el rol del gobierno en esos contenidos”.
Así, pues, a seguir sufriendo la radio cloaca, pues ya el ministerio se declaró impedido para controlarla.
Desde hace meses venían enfrentados el periodista de Caracol, Darío Arizmendi y el ex asesor presidencial, José Obdulio Gaviria, primo hermano del temido narcotraficante Pablo Escobar.
De un tiempo para acá este pugilato parece haber llegado a una especie de armisticio y nada ha vuelto a trascender sobre esta pelea que se dio entre reclamos, de una parte y críticas, del otro, todo alrededor de situaciones que se presentaron durante los dos gobiernos del expresidente Uribe.
Siendo ambos dos gallos de pelea, la gente se pregunta qué ocurrió para que cesaran los mutuos ataques que se hacían el periodista y el primo del narcotraficante.
Sería que Arizmendi, de pronto, encontró algo que le sirvió para decirle a José Obdulio, por ejemplo, “hagámonos pasito” y que éste entendió perfectamente el significado de estas dos palabras?
Averígüelo Vargas, como dicen por ahí, pero algún día se sabrá el motivo de la tregua.
Qué vergüenza
El Concejo de Medellín tiene 21 integrantes. Pero que sólo cinco de ellos atiendan con juicio la citación a un funcionario y le escuchen su informe de gestión, es algo que no debería ocurrir.
Sin embargo eso fue lo que pasó el viernes con el gerente de Metroparques, quien entre dolido y ofendido, suponemos, entregó sus informaciones a cinco concejales apenas, pues los demás estaban en asuntos particulares o políticos.
Y algunos de los cinco presentes en el recinto, twiteando, hablando por celular o roncando.
Y después algunos preguntan por qué la política y los políticos tienen tal grado de desprestigio. Si todos los días hacen algo para aumentar esa adversa opinión de la comunidad.
Larga vida a la radio cloaca
La radio de albañal que se ejerce en buena parte del dial colombiano, tanto del AM como del FM recibió el beneplácito del ministro de Comunicaciones, Diego Molano, quien se limitó a afirmar simplemente que “en Colombia hay libertad de expresión”.
Confundió el despistado ministro libertad de expresión con vulgaridad, y de paso le dio vía libre a todos los desadaptados que ahora invaden el dial noche y día con contenidos dignos de un burdel, pero nunca de una emisora respetable.
Se declaró impotente el ministro Molano ante ese condenable proceder de buena parte de la radio antioqueña y colombiana, al afirmar que por fallos de las cortes en Colombia hay libertad de expresión y que bajo esa libertad de expresión “la corte constitucional ha limitado muchísimo el rol del gobierno en esos contenidos”.
Así, pues, a seguir sufriendo la radio cloaca, pues ya el ministerio se declaró impedido para controlarla.
Absurda posición
En el colmo del absurdo, el ministro Diego Molano dijo también que si alguien tiene una queja sobre esa vulgaridad en la radio, “que me haga llegar un radicado que diga dónde está el tema”, después de afirmar que desconocía lo que estaba pasando.
Si se le hiciera caso al ministro y aquí hubiera autoridad y se cumpliera lo escrito, de seguro que recibiría diariamente más de un millón de quejas como él las solicita, pero nadie va a perder su tiempo enviando a un ministerio inoperante quejas que no van a surtir ningún efecto.
De plácemes deben estar los ávidos empresarios radiales que hipotecaron su conciencia y su obligación de servir a la comunidad, al primer analfabeta irresponsable que, dinero en mano y por adelantado, les paga por sus horrendos espacios.
En el colmo del absurdo, el ministro Diego Molano dijo también que si alguien tiene una queja sobre esa vulgaridad en la radio, “que me haga llegar un radicado que diga dónde está el tema”, después de afirmar que desconocía lo que estaba pasando.
Si se le hiciera caso al ministro y aquí hubiera autoridad y se cumpliera lo escrito, de seguro que recibiría diariamente más de un millón de quejas como él las solicita, pero nadie va a perder su tiempo enviando a un ministerio inoperante quejas que no van a surtir ningún efecto.
De plácemes deben estar los ávidos empresarios radiales que hipotecaron su conciencia y su obligación de servir a la comunidad, al primer analfabeta irresponsable que, dinero en mano y por adelantado, les paga por sus horrendos espacios.
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Como perros y gatos
En los círculos del poder, los personajes no dirimen sus discrepancias
con argumentos y razones, sino intercambiando ofensas personales. Esa modalidad
se volvió costumbre. A través de las redes sociales, los insultos entre
políticos en discordia van y vienen. El insulto es su arma de combate. Así
pervierten y banalizan lo que debe ser una civilizada lucha política. En
relación con el proceso de paz que se desarrolla en La Habana, es bueno y
necesario manifestar los desacuerdos. Pero es repudiable que estos degeneren en
acciones que ponen en peligro la seguridad de las personas.
Revelar coordenadas de la zona de donde salía gente de las Farc que iba a Cuba a participar en el proceso fue un acto irresponsable del expresidente Álvaro Uribe. Y fue atrevido y retador instalar en los tejados vallas con las caras del bandido Pablo Escobar y del subversivo ‘Iván Márquez’, más una pregunta: ‘¿Quién ha matado más policías?’, y un nombre: Francisco Santos. El exvicepresidente, más sagaz que compañeros suyos, que también busca la candidatura presidencial del Centro Democrático, refugio político del uribismo, madrugó poniendo vallas.
El primo hermano doble del Presidente de la República y casi más enemigo del mandatario que el propio Álvaro Uribe, con las vallas mata dos pájaros de un tiro: ataca el proceso de paz y pone su nombre a sonar. Con esa jugada, se adelanta a sus rivales, pues lanza su campaña publicitaria antes de tiempo. Esa jugada podría costarle caro si las autoridades se rebullen y proceden a retirar las vallas. Por prematuras y escandalosas. Porque, entronizando en los tejados a Pablo Escobar y a ‘Iván Márquez’, se ofenden los sentimientos de millones de víctimas.
En vísperas de elecciones crecen las ambiciones y los políticos se agarran de las mechas. Cada cual defiende lo suyo y trata de asegurar nuevos terrenos. Unos buscan “más tostadas y más mermelada”, como diría el exministro Echeverry, y otros buscan votos. Para mantenerse siempre en escena, mandatarios y exmandatarios se agarran como perros y gatos intercambiando ataques e insultos.
También se agarran los funcionarios. Por cuenta de la Marcha por la Paz hubo serio encontrón entre el fiscal general, Eduardo Montealegre, y el procurador general, Alejandro Ordóñez. Este criticó la participación del Fiscal en la marcha, pues dijo que, por el oficio que ejerce, debe ser neutral. Y, más papista que el papa, Ordóñez presume que en las negociaciones de La Habana todo apunta a perjudicar al país para favorecer a los reos de delitos atroces. Por ser quien es y por el puesto que ocupa, esa opinión suya es muy grave y ofende, además, a los delegados del Gobierno que trabajan por la paz en La Habana. Si al Fiscal le exige ser neutral en ese terreno, su obligación, como Procurador, es hacer lo mismo. Al atacar abiertamente el proceso de paz, Ordóñez comete prevaricato, pues no defiende los intereses de la sociedad, como le ordena la Constitución –artículo 277, punto 2–. Hoy, interés primordial de la sociedad es lograr la paz. Luego es mejor que Ordóñez no dé lecciones, sino que cumpla con sus deberes.
En el Capitolio también hay agarrones. Y embarrada sin retorno. Por ejemplo, elegir para la Corte Constitucional al candidato Alberto Rojas, pues su hoja de vida, investigada a fondo por la Silla Vacía, revela actividades económicas y profesionales poco transparentes. No obstante, apoyado por Simón Gaviria, director del Partido Liberal, fue elegido.
No actuaron con la misma diligencia en el debate sobre matrimonio entre homosexuales. Roy Barreras, presidente del Senado, dio la pauta. Convino con un pastor no aprobar esa unión como matrimonio, sino como contrato solemne.
Terminado su discurso, se acabó la trasmisión por TV. Y terminó el debate porque sin TV los honorables no funcionan.
A este paso, ojalá el senador Benedetti, autor del proyecto, no acabe frustrado. Pero podría suceder, pues aquí no se respetan los derechos de las minorías. Más bien se atropellan.
Revelar coordenadas de la zona de donde salía gente de las Farc que iba a Cuba a participar en el proceso fue un acto irresponsable del expresidente Álvaro Uribe. Y fue atrevido y retador instalar en los tejados vallas con las caras del bandido Pablo Escobar y del subversivo ‘Iván Márquez’, más una pregunta: ‘¿Quién ha matado más policías?’, y un nombre: Francisco Santos. El exvicepresidente, más sagaz que compañeros suyos, que también busca la candidatura presidencial del Centro Democrático, refugio político del uribismo, madrugó poniendo vallas.
El primo hermano doble del Presidente de la República y casi más enemigo del mandatario que el propio Álvaro Uribe, con las vallas mata dos pájaros de un tiro: ataca el proceso de paz y pone su nombre a sonar. Con esa jugada, se adelanta a sus rivales, pues lanza su campaña publicitaria antes de tiempo. Esa jugada podría costarle caro si las autoridades se rebullen y proceden a retirar las vallas. Por prematuras y escandalosas. Porque, entronizando en los tejados a Pablo Escobar y a ‘Iván Márquez’, se ofenden los sentimientos de millones de víctimas.
En vísperas de elecciones crecen las ambiciones y los políticos se agarran de las mechas. Cada cual defiende lo suyo y trata de asegurar nuevos terrenos. Unos buscan “más tostadas y más mermelada”, como diría el exministro Echeverry, y otros buscan votos. Para mantenerse siempre en escena, mandatarios y exmandatarios se agarran como perros y gatos intercambiando ataques e insultos.
También se agarran los funcionarios. Por cuenta de la Marcha por la Paz hubo serio encontrón entre el fiscal general, Eduardo Montealegre, y el procurador general, Alejandro Ordóñez. Este criticó la participación del Fiscal en la marcha, pues dijo que, por el oficio que ejerce, debe ser neutral. Y, más papista que el papa, Ordóñez presume que en las negociaciones de La Habana todo apunta a perjudicar al país para favorecer a los reos de delitos atroces. Por ser quien es y por el puesto que ocupa, esa opinión suya es muy grave y ofende, además, a los delegados del Gobierno que trabajan por la paz en La Habana. Si al Fiscal le exige ser neutral en ese terreno, su obligación, como Procurador, es hacer lo mismo. Al atacar abiertamente el proceso de paz, Ordóñez comete prevaricato, pues no defiende los intereses de la sociedad, como le ordena la Constitución –artículo 277, punto 2–. Hoy, interés primordial de la sociedad es lograr la paz. Luego es mejor que Ordóñez no dé lecciones, sino que cumpla con sus deberes.
En el Capitolio también hay agarrones. Y embarrada sin retorno. Por ejemplo, elegir para la Corte Constitucional al candidato Alberto Rojas, pues su hoja de vida, investigada a fondo por la Silla Vacía, revela actividades económicas y profesionales poco transparentes. No obstante, apoyado por Simón Gaviria, director del Partido Liberal, fue elegido.
No actuaron con la misma diligencia en el debate sobre matrimonio entre homosexuales. Roy Barreras, presidente del Senado, dio la pauta. Convino con un pastor no aprobar esa unión como matrimonio, sino como contrato solemne.
Terminado su discurso, se acabó la trasmisión por TV. Y terminó el debate porque sin TV los honorables no funcionan.
A este paso, ojalá el senador Benedetti, autor del proyecto, no acabe frustrado. Pero podría suceder, pues aquí no se respetan los derechos de las minorías. Más bien se atropellan.
LUCY NIETO DE SAMPER - lucynds@gmail.com
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La información e imágenes publicadas en
esta revista están extractadas de la Internet, principalmente de Google,
EL COLOMBIANO, El Barquero de EJE 21, EL TIEMPO, EL ESPECTADOR, EL
CAMPANARIO, LA BARCA DE CALDERÓN, EL
OBSERVATORE ROMANO, de la página no censurada de JUAN GUERRA, CLARIN desde Argentina, EL UNIVERSO desde Ecuador, EL
INFORMADOR desde Santa Marta, PORTAFOLIO,
Juan Gossaín, DINERO, DIARIO DE AMÉRICA, PERIODISMO SIN FRONTERAS y
demás prensa lo mismo que los correos que llegan vía email. Si hay
algún error o queja, se pueden contactar con nosotros en: avizor2012@gamil.com. Además, los
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